NFT: ¿Qué pasa con los derechos de propiedad intelectual?

La propiedad intelectual (PI) es un término amplio que puede referirse a cualquier producto del intelecto humano. Incluye derechos de autor, patentes, marcas registradas y secretos comerciales. Los derechos de propiedad intelectual protegen a los propietarios de la propiedad intelectual del uso no autorizado por parte de terceros.

En términos de NFT, estos derechos pertenecen a sus creadores, es decir, los artistas o diseñadores individuales y las marcas detrás de los proyectos.

El concepto de propiedad de NFT a menudo se malinterpreta. Los artistas han encontrado un gran valor en la comercialización de su trabajo en los mercados NFT debido a la facilidad de recibir regalías generadas a través de sus creaciones. Dicho esto, hay una serie de implicaciones de propiedad intelectual que han surgido a medida que los NFT´s han ganado popularidad.

Los compradores de NFT no poseen el activo subyacente real, sino solo el token que lo representa. Un NFT es la certificación digital de este token y, dado que está registrado en la cadena de bloques, los compradores pueden probar la compra.

Sin embargo, la compra de un NFT no otorga los derechos de autor del trabajo subyacente, como la reproducción y distribución de copias, la creación de derivados basados en el trabajo original o la interpretación del trabajo en público. El creador original conserva la propiedad de los derechos de propiedad intelectual.

La situación se asemeja a comprar una edición impresa de una obra de arte. En ese caso, lo que posee es solo esa edición de la obra de arte, no los derechos de autor asociados con ella. Por ejemplo, no puede imprimir la obra de arte en una taza de café con fines comerciales.

Sin embargo, en la práctica, algunas marcas y creaciones de NFT prefieren implementar diferentes términos de uso. Estos van desde la concesión de plenos derechos hasta la concesión de licencias limitadas. Están codificados en el contrato inteligente de NFT o escritos en acuerdos externos.

Estos contratos son muy comunes en proyectos de NFT. Pueden otorgar los derechos para copiar, mostrar o revender NFT.

Un ejemplo es la licencia utilizada por uno de los proyectos NFT más conocidos: Crypto Kitties. Esta licencia permite a los titulares de NFT revender la obra de arte y comercializar su propia mercancía por un ingreso anual máximo de USD 100,000.

Otros proyectos de NFT pueden usar los mismos términos de licencia o una variación. Por ejemplo, RTFKT implementa una licencia de uso comercial limitada para los CloneX NFT. Los titulares de NFT pueden producir derivados y fan art, así como vender mercancías, mientras que la colección NBA Topshot restringe cualquier derecho a modificar o comercializar los NFT y solo permite los derechos de uso y exhibición.

Los mercados también abordan el tema de la propiedad intelectual de diferentes maneras. Por ejemplo, los creativos que acuñan su trabajo en mercados secundarios como Rarible y OpenSea suelen otorgar licencias de NFT directamente al comprador. Como resultado, estos mercados no poseen los NFT ni los derechos de autor relacionados. Se espera que los creativos que venden su trabajo en mercados, como SuperRare, permitan actividades promocionales para NFT, lo que puede requerir la concesión de derechos de distribución y visualización.

Recuerda que estas son solo prácticas generales. Cuando compres un NFT, siempre lee los términos de servicio de esa plataforma en particular.

Si bien un NFT otorga cierto acceso al trabajo “minteado” (acuñado), no necesariamente se traduce en poseer todos los derechos de autor (es decir, el derecho a reproducirlo, transformarlo o adaptarlo). Como tal, sería más análogo a proporcionar un enlace a la obra que a los derechos de la obra en sí.

Algunas licencias pueden otorgarse a través de un NFT, y es importante tener en cuenta qué derechos otorgan realmente esas licencias. Por ejemplo, se pueden otorgar derechos para exhibir una obra de arte, pero no para copiarla ni comercializarla.

Al comprar una copia de un trabajo creativo de un NFT, es importante observar qué licencias se otorgan en virtud del acuerdo de compra. Del mismo modo, los vendedores deben ser explícitos sobre qué derechos se otorgan realmente al estructurar contratos inteligentes.

Los problemas habituales de propiedad intelectual derivados de NFT podrían ser:

A.- Determinar lo que realmente se vende

El primer problema tiene que ver con lo que realmente se vende, cuando se compra un NFT. Como ya se dijo, la compra de un NFT no se traduce necesariamente en la compra de los derechos de autor de ese activo subyacente. Los compradores deben tener cuidado con lo que realmente están comprando. Del mismo modo, los vendedores deben tener cuidado de estipular lo que se transfiere cuando venden un NFT por una parte de su trabajo. El contrato debe estar claramente redactado y explícito en términos de lo que se vende y lo que no.

B.- Problemas de falsificación

Donde haya obras de arte valiosas de cualquier tipo, habrá personas que intenten explotarlas para su propio beneficio económico. Han surgido problemas de falsificación de NFT´s, con falsificadores que intentan hacer pasar NFT´s como su propio trabajo, por sobre el artista original. Las disputas que surgen entre los artistas y los falsificadores pueden ser prolongadas y costosas, lo que hace que sea un problema complicado de resolver.

El empleo de medidas preventivas como las marcas de agua puede ayudar a prevenir la falsificación. Si aún ocurre, se puede estudiar la eliminación de la falsificación bajo la DMCA (Digital Millennium Copyright Act); Ley de Derechos de Autor de la Era Digital, que consiste en una ley federal de USA, que regula los derechos de autor de ese país, implementando dos tratados del año 1996 de la OMPI, Organización Mundial de la Propiedad Intelectual) y puede orientar algún recurso legal cuando se trata de proteger tu trabajo. Pero, como vimos, esta ley rige para USA, no así para los otros países, que tienen sus propias leyes.

Como vemos, los derechos de propiedad intelectual sobre un NFT resultan un tema complejo. Algo que va más allá del archivo que llega a la billetera digital, con la información de la cadena de bloques.. Es preciso conocer acerca de  las condiciones de venta del NFT, que son establecidas por el creador del NFT o la plataforma que los comercializa. Así, se puede identificar el alcance de la propiedad del activo que se adquiere, en términos de si solo es el NFT como archivo que contiene una información, o bien si el NFT dispone el traspaso de la propiedad intelectual del bien que se está adquiriendo, para hacer nuevas obras utilizando la comprada o hacer copias de la obra en cuestión y venderlas.

La reflexión invita a conceder importancia a la obra de arte, cuidando acerca de los orígenes de la obra y los términos y condiciones que se han establecido para la disposición del NFT. Por favor, evita conflictos y antes de comprar o vender, precia con exactitud el fundamento de la propiedad intelectual. Eso te hará un proveedor, inversionista o consumidor responsable y respetable..