Ethereum para novicios

Ethereum[2] no está controlado por una sola entidad, existe únicamente a través de la participación descentralizada y la cooperación de la comunidad. Ethereum hace uso de nodos (una computadora con una copia de los datos de la cadena de bloques de Ethereum) operados por voluntarios, que reemplazan a los sistemas individuales de servidores y servicios de computación en la nube de los principales proveedores de Internet.

Estos nodos distribuidos, dirigidos por individuos y empresas de todo el mundo, proporcionan solidez a la infraestructura de la red de Ethereum. Esto genera que sea menos vulnerable a los ataques informáticos o a los intentos de censura. Desde su lanzamiento en 2015, Ethereum nunca ha sufrido inactividad. Hay miles de nodos individuales ejecutándose en la red de Ethereum. Por eso Ethereum es una de las criptomonedas más descentralizadas, superada únicamente por el bitcoin.

Mientras que Bitcoin tiene como objetivo desbloquear nuevas oportunidades en las redes financieras globales, Ethereum busca hacer lo mismo con las redes computacionales globales utilizando contratos inteligentes. Los contratos inteligentes son scripts de código que se implementan en la cadena de bloques de Ethereum.

Los desarrolladores crean este tipo de contrato en la cadena de bloques de Ethereum, proporcionando un conjunto de instrucciones para que se lleven a cabo computacionalmente. Los contratos inteligentes pueden establecer parámetros para que los fondos depositados en una cuenta solo puedan retirarse cuando todas las partes involucradas acuerden por consenso.

Otro ejemplo práctico del uso de contratos inteligentes es si dos personas están tratando de llevar a cabo un acuerdo. Si alguien está alquilando un automóvil, el contacto puede indicar que las claves digitales se liberarán automáticamente una vez que se reciba el pago. Los contratos inteligentes funcionan con un enfoque “si-entonces”, por lo que si el arrendatario no paga el precio acordado, las llaves no se liberan y la red genera automáticamente un reembolso.

Los contratos inteligentes son simplemente programas en la cadena de bloques que se ejecutan de acuerdo con cómo los desarrolló el programador. Los contratos inteligentes también pueden actuar como registros o registros y almacenar digitalmente detalles de membresía o información de identificación en la cadena de bloques.

Estos son algunos de los beneficios clave del uso de contratos inteligentes:

Autonomía: los contratos inteligentes no dependen de la confirmación de terceros para ejecutar el acuerdo. Esto reduce el peligro de que el contrato sea manipulado por un tercero porque la red administra la ejecución del contrato en lugar de otras partes que podrían tener un sesgo o implementar los contratos con errores.

Copia de seguridad: la cadena de bloques está diseñada para distribuirse por la red para garantizar que el documento se duplique muchas veces, por lo que no hay riesgo de perderlo a través de un punto central de falla.

Velocidad: los contratos inteligentes usan código de software para automatizar tareas, lo que agiliza la eficiencia y ayuda a las empresas a implementar acuerdos más rápidos. El uso de contratos inteligentes ayuda a automatizar varias partes clave de un proceso de acuerdo y permite transacciones rápidas y confiables.

Los contratos inteligentes siguen siendo una tecnología bastante nueva, pero tienen una amplia gama de aplicaciones en los sistemas de votación del mundo, las cadenas de suministro globales, los registros médicos y de salud, los sistemas financieros y más.

Esto es posible gracias a las ventajas de la tecnología blockchain, que permite asegurar y validar todas las transacciones realizadas con la criptomoneda Ether. Estos contratos realizan automáticamente todo tipo de acciones, en su mayoría transacciones, que han sido previamente acordadas por todas las partes involucradas. Figura 1.

Así que ahora tenemos una comprensión básica de los contratos inteligentes y cómo se pueden usar en una red de cadena de bloques para crear un tipo de acuerdo innovador. La red Ethereum utiliza estos contratos inteligentes en el desarrollo de aplicaciones descentralizadas en blockchain.

Las aplicaciones tradicionales son bien conocidas por la mayoría de los usuarios que descargan aplicaciones de la App Store en iPhone o Android. Las aplicaciones permiten a los usuarios realizar funciones únicas, como verificar los saldos de las cuentas bancarias, desplazarse por las noticias de las imágenes de los amigos o incluso jugar su juego de cartas favorito.

Dapps siguen el mismo concepto. Sin embargo, se ejecuta en una plataforma respaldada por una red de nodos en lugar de un grupo central. Esto permite varios beneficios y ventajas sobre nuestras aplicaciones tradicionales.

A prueba de manipulaciones: Ethereum se beneficia de las propiedades de la tecnología blockchain, lo que significa que es resistente a la manipulación de terceros. Dapps puede implementarse en la red sin preocuparse por un control de secuestro de terceros no autorizado. Además, la cadena de bloques se construye utilizando un principio de consenso, por lo que todos los nodos y usuarios de la red deben ponerse de acuerdo sobre cada cambio antes de ejecutarlo. Esto ayuda a mitigar el posible fraude y corrupción de la red.

Descentralizado: la plataforma Ethereum también tiene el principio clave de blockchain de descentralización. No hay un único punto de falla para la red, lo que significa que las aplicaciones alojadas en la red nunca fallan ni se desconectan. Esto también tiene implicaciones de seguridad que protegen la red contra posibles intentos de piratería.

Código abierto: los usuarios pueden ver el código fuente de la dapp tanto en el back-end como en el front-end. Esto significa que no hay ningún código “escondido bajo el capó” que esté ejecutando funciones adicionales que pueden no ser beneficiosas para el usuario.

Sin tiempo de inactividad: debido a que las dapps se ejecutan en una red de nodos que admiten la cadena de bloques, no hay un punto de falla que pueda desconectar toda la aplicación. Eso significa que el servicio de la aplicación siempre está operativo y funcional, lo que mitiga el riesgo de caídas y fallas del sistema.

Fácil implementación: las dapps creadas en la cadena de bloques de Ethereum brindan mucho valor a los desarrolladores porque no tienen que salir y crear una aplicación de cadena de bloques desde cero. En cambio, el marco existe a través del protocolo Ethereum y ayuda a los desarrolladores a ahorrar tiempo y esfuerzo valiosos cuando intentan crear una nueva aplicación. Luego, para usar la red descentralizada de Ethereum, las dapps pagan directamente las tarifas de transacción de la red en Ether.

Ethereum tiene una criptomoneda nativa llamada ether (ETH)[4]. Es completamente digital y se puede enviar a cualquier persona del mundo al instante. Ningún gobierno ni empresa controla el suministro de ETH, está descentralizado y es completamente transparente. Las nuevas monedas (comúnmente llamadas también tókenes) las crean únicamente para los denominados participantes que velan por la red.

Cada acción en la red Ethereum requiere una cierta cantidad de poder computacional. El coste por este poder de computación se paga en en Ether. Esto significa que se necesita al menos una pequeña cantidad de ETH para usar la red.

Ether se confunde comúnmente con la plataforma en sí: cuando escucha a alguien hablar sobre el precio de Ethereum, se refiere a ether (ETH), no a Ethereum. Ether es el método de pago en Ethereum Virtual Machine (EVM), que se utiliza para pagar a los participantes de la red los gastos (y un poco más) en los que incurren para proteger la cadena de bloques y validar las transacciones.

Ether también tiene un valor de mercado: consulta cualquier intercambio de criptomonedas y encontrará Ethereum en la lista justo debajo de Bitcoin, aunque la lista en realidad se refiere a ether (ETH). Los consumidores pueden usar ether como pago por bienes o servicios en los comerciantes y minoristas participantes.

Los inversores y comerciantes pueden usarlo en su búsqueda para ganar dinero con dinero. Por ejemplo, muchos inversores utilizan estrategias similares a las que utilizarían al comprar y vender en el mercado de valores, como comprar y mantener; los comerciantes compran y venden en función de los movimientos de precios más pequeños a lo largo de un día de negociación.

Como todas las criptomonedas, el ETH es volátil y experimenta grandes oscilaciones de precios. Cualquier producto derivado de él o que lo utilice es, por tanto, susceptible de las mismas oscilaciones; incluso podrían ser amplificados por el producto. El potencial de ganancias es alto, al igual que el potencial de pérdidas.

Aunque ETH es la criptomoneda nativa de Ethereum, está disponible en todos los intercambios de criptomonedas. Puede encontrarlo en intercambios populares como Coinbase, Kraken, Gemini, Binance, Satoshi Tango, Buda, etc.

Para comprar ETH, solo necesitas tener una billetera digital compatible con el intercambio elegido o usar la billetera de ese intercambio. En su mayor parte, vinculas una cuenta bancaria con tu billetera y transfiere fondos al intercambio por ETH.

Comprar criptomonedas parece ser la pregunta habitual para muchas personas. La clave está en entenderlo y saber cómo lo vas a utilizar. Por ejemplo, si deseas realizar compras en línea con menos entidades que sepan lo que estás haciendo, ETH es una excelente manera de hacerlo. Solo necesitas comprar la cantidad que crees que necesitarás y gastarla en negocio minorista en línea que lo acepte. Sin embargo, asegúrate de tener en cuenta las tarifas de transacción que cobra la red Ethereum: puedes pagar algunos dólares en tarifas por la conveniencia, más el impuesto a las ventas.

Si piensas en invertir en ETH, es posible que necesites hablar con un asesor financiero profesional y discutir cómo ETH puede aumentar (o perder) tu capital. Las criptomonedas son volátiles, por lo que es útil contar con ayuda o bien estudiar principios de trading, para administrar entradas y salidas de activos de tu cartera de inversiones.

Si ETH es una buena inversión depende de la perspectiva. Si piensas que el precio de ETH subirá, puedes tolerar los riesgos de las criptomonedas e invertir dinero que puedes permitirte perder, ETH podría ser una buena inversión. Pero, insistimos, depende de la perspectiva y del análisis permanente que hagas de los mercados. A fin de cuentas, la responsabilidad de usar tu dinero te corresponde a ti mismo.

La cadena de bloques Ethereum lleva una gran trayectoria, además considerando su criptomoneda ETH como la segunda más importante, tras el popular Bitcoin.

La red Ethereum ha ido desarrollando importantes aplicaciones (DApps) que van dando vida al ecosistema digital, haciendo que la interacción de las personas sea más activa y abriendo paso a nuevos mercados digitales de gran proyección económica, financiera y comercial, apoyando la valoración de contenidos y potenciando incluso la valoración de bienes físicos, como los bienes raíces. Incluso yendo hacia mayores desarrollos para crear nuevos mercados digitales de alto impacto.

Al mismo tiempo, tanta novedad, que es liberada como abriendo una compuerta de avalanchas, da la oportunidad para que también genius inescrupulosos usen toda su capacidad creativa y desarrollen las formas más sofisticadas que podemos imaginar, para robar los fondos de personas desprevenidas.

Para evitar estos riesgos y miedos, hacemos un llamado a ocuparse de la educación tecnológica, financiera y seguridad digital, como temas de alta prioridad que apoyen la participación activa y responsable en estas nuevas herramientas que ya están comenzando a tomar espacios no solo en la red Ethereum, sino que además en otras cadenas de bloques como Solana[5], Polygon[6] y Tezos[7].

Nuestra cruzada, como Todos NFT, está por la educación de las personas, pensando en la construcción digital de un nuevo ambiente integrado que soportará nuestra futuras interacciones en todo orden de cosas. Tal como ya lo han adelantado expresamente el Foro Económico Mundial y la Cámara de Comercio Internacional.

No se debe esperar a ser llevado por una corriente brutal, cuando existe la oportunidad de realizar una migración inteligente y escalonada hacia los nuevos horizontes digitales.