Los delitos que se cometen en el “criptoambiente” son múltiples, desde grandes robos de criptomonedas, hasta estafas muy sofisticadas, inventando “instrumentos de inversión” que prometen rentabilidades astronómicas (“to the moon”) y que, con caras bonitas y bonachonas, son capaces de aspirar hasta el último centavo, hasta el último satoshi desde el bolsillo más inocente o más hipnotizado.
Las maravillas modernas de las finanzas electrónicas, sin duda, ofrecen grandes oportunidades de inversión, cuando el inversionista está bien capacitado para la toma de decisiones financieras. En ese escenario, por supuesto que el trabajo intelectual tiene muy buena recompensa. Sin embargo, como regla matemática, suele suceder que “a menor preparación” el “riesgo es mayor”. Excepto que sea un golpe de suerte excepcional y que provoca un efecto de golpe de adrenalina, “excitando a la persona para que busque nuevas oportunidades y gane dinero otra vez, debido a otro golpe de suerte.
Pero, en esa nueva búsqueda por caminos muy alternativos, el “eufórico inversionista” comienza a correr riesgos innecesarios y, finalmente, en el caso de ser objeto de una estafa, realmente se transforma en cómplice de su propia estafa, luego de entregar todos los elementos que el estafador requiere para cometer su delito.
Ahora bien, nos detenemos a pensar qué factores facilitan la conformación de un medio ambiente maravilloso para que una persona sea objeto de estafa. En primer lugar podemos advertir que no hay normas claras que guíen las conductas generalmente aceptadas por estos nuevos mercados de criptomonedas y demás criptoactivos. dejando a los iinversores en cierta desventaja, respecto de mercados de valores tradicionales. También, la misma volatilidad de los precios de las “cryptos”, cuando están en momento alcista, sin duda contribuye a que millones de personas se sumen casi sin pensar en los riesgos, porque el éxtasis es muy fuerte, con el miedo de quedarse afuera del impulso alcista. Otro factor común, consiste en la presión “estética y social” de recibir ofertas de cuentas bots o sujtos que preparan lindos memes o banners, con anuncios fantásticos de invitación, primero a participar de airdrops y luego comienzan a operar las técnicas de persuasión para que la persona objetivo ceda.También están los acosos mediante emails o mensajes privados en redes, invitando a participar de nuevos proyectos, tales como DeFi, NFT´s, metaversos, pools y un largo etcétera de “tecnologías” para llegar primeros y gozar de las utilidades cuantiosas que hay esperando a solo un click de distancia. Phishing esquemas Ponzi, entre otros métodos de estafas sacuden las redes todos los días, todo el día.
Como en Todos NFT nos preocupa la seguridad de nuestros seguidores, hemos preparado una serie de temas importantes que se deben considerar para aprender a reconocer la importancia de capacitarse y entrenarse para no ser objeto de estafas. Demos un vistazo panorámico.