Avalanche AVAX para novicios

La cadena de bloques Avalanche es un libro de contabilidad distribuido basado en Internet y una plataforma informática compuesta por muchos componentes diferentes y en evolución aportados por una amplia variedad de participantes. Avalanche sigue creciendo y cambiando gracias a los esfuerzos de su comunidad.

El soporte lo realiza la Fundación Avalanche[3], que es un miembro activo de esa comunidad, tanto directa como indirectamente, a través de sus programas de subvenciones, capital semilla e inversión, así como de varios proveedores de servicios, incluidos Ava Labs[4] y sus subsidiarias. Contribuye al desarrollo, la implementación y el mantenimiento continuos de Avalanche y su comunidad, financiando, publicitando y fomentando el desarrollo e implementación de diferentes tipos de software, tales como contratos inteligentes y aplicaciones descentralizadas, sub redes, API, utilidades y actualizaciones, puentes a otras cadenas de bloques y software de billetera, ayudando a otros a hacer lo mismo; hacer staking de tokens y operar uno o más nodos/validadores; creando contenido escrito, en video y de otro tipo en sitios web, varias plataformas de redes sociales y otros lugares; y en general, ser un recurso importante para la comunidad.

La Fundación Avalanche es una organización sin fines de lucro, pero algunas de las actividades pueden generar ingresos o retornos de inversión, que se reinvierten en la comunidad de la red y se utilizan para pagar a los proveedores de servicios. La Fundación y sus relacionados pueden negociar con tokens AVAX y varios otros criptoactivos (ya sean tokens fungibles o no fungibles) creados en su cadena de bloques; así como los contratos inteligentes y las aplicaciones descentralizadas que se ejecutan en Avalanche. Estas transacciones y transferencias pueden ocurrir como ventas privadas y/o en transacciones de mercado abierto, y/o a través de protocolos DeFi y otros medios.

Para entender mejor cómo funciona Avalanche, es necesario echar un vistazo a tres componentes clave del ecosistema:

Consenso de Avalanche: Avalanche Consensus es un algoritmo único que combina características de Nakamoto y mecanismos de consenso clásicos para volverse escalable, robusto, energéticamente eficiente y descentralizado con alto rendimiento y rápida finalidad.

Subredes: Avalanche tiene una arquitectura multicadena, en la que las subredes forman redes soberanas. Las subredes pueden definir sus propias reglas para la tokenomics y la membresía. Consisten en un subconjunto dinámico de validadores de Avalanche, que colaboran para validar las cadenas de bloques dentro del ecosistema.

Red primaria: como red heterogénea de cadenas de bloques, Avalanche permite a los desarrolladores crear cadenas separadas para diferentes aplicaciones. La red primaria es una subred especial donde operan tres cadenas de bloques diferentes: la cadena de contratos (C-Chain) que ejecuta contratos inteligentes EVM, la cadena de plataformas (P-Chain) que coordina los validadores y crea subredes, y la cadena de intercambio (X-Chain) que crea e intercambia activos.

La red primaria y todas las subredes en producción forman la red principal de Avalanche, la red principal lista para producción donde tienen lugar las transacciones reales y las ejecuciones de contratos inteligentes.

Avalanche tiene como objetivo resolver algunos de los problemas que enfrenta la tecnología blockchain con tres características novedosas. Tiene un mecanismo de consenso de prueba de participación (PoS) alternativo, utiliza subredes y su red principal consta de tres cadenas de bloques principales en lugar de una.

Consenso

El consenso de Avalanche se basa en el PoS clásico y funciona convirtiendo cada nodo de validación en una estación de votación independiente que decide si se rechaza o acepta una nueva transacción.

El mecanismo de consenso utiliza entonces un “submuestreo aleatorio repetido”[6], en el que un nodo selecciona un pequeño grupo de otros validadores para tomar una decisión hasta que la red alcanza un umbral de confianza en la transacción.

De esta manera, el protocolo de consenso de Avalanche está diseñado para la escalabilidad y al mismo tiempo garantiza un margen de error muy bajo. El consenso de Avalanche también tiene un menor consumo de energía en comparación con muchas otras cadenas, ya que los nodos solo están activos cuando necesitan votar una transacción.

Sub redes

Los desarrolladores de Avalanche pueden lanzar sus propias cadenas de bloques personalizadas con sus propias reglas. El consenso para estas cadenas independientes se logra a través de sub redes, grupos de nodos seleccionados para validar conjuntos de cadenas de bloques. Las sub redes también participan en la validación de la red principal de Avalanche. La función es comparable a otras soluciones de escalado de cadenas de bloques, como las paracadenas de Polkadot, y la actualización de la capa de consenso de Ethereum.

Representación visual de las sub redes:

Avalanche utiliza una combinación de métodos que la hacen única, porque, como hemos dicho, está compuesta por tres blockchains principales interoperables:

Exchange Chain (X-Chain) se utiliza para crear e intercambiar tokens AVAX y otros activos digitales. Las comisiones de transacción se pagan en AVAX, y la blockchain utiliza el protocolo de consenso Avalanche.

Contract Chain (C-Chain) permite a los desarrolladores crear contratos inteligentes para DApps. Esta cadena implementa una instancia de la Ethereum Virtual Machine (EVM), lo que facilita tener DApps compatibles con EVM. Utiliza una versión modificada del protocolo de consenso de Avalanche llamado Snowman.

Platform Chain (P-Chain) coordina a los validadores de la red, rastrea Subnets activas y permite la creación de nuevas Subnets. P-Chain también utiliza Snowman.

Con cada blockchain asumiendo diferentes roles, Avalanche mejora la velocidad y escalabilidad, en comparación con la ejecución de todos los procesos en una sola cadena. Los desarrolladores de Avalanche han creado mecanismos de consenso a medida, para las necesidades de cada blockchain. Los usuarios necesitan AVAX para hacer staking y pagar comisiones de red, lo que brinda al ecosistema un activo de uso común.

Avalanche usa dos protocolos de consenso, haciendo que este sistema dual dote de escalabilidad y velocidad de procesamiento para transacciones mejoradas de la red.

El protocolo de consenso de Avalanche no necesita un líder para llegar a un consenso como Proof of Work (PoW), Proof of Stake (PoS) o Delegated Proof of Stake (DPoS). Este factor aumenta la descentralización de la red Avalanche sin sacrificar la escalabilidad. Por el contrario, PoW, PoS y DPoS terminan teniendo transacciones de proceso de un actor, cuyo trabajo es posteriormente validado por otros.

La red Avalanche implementa un protocolo de consenso optimizado de tipo Gráfico Acíclico Dirigido (DAG; Directed Acyclic Graphic). Un DAG permite que la red procese transacciones en paralelo. Los validadores sondean una muestra de otros validadores para determinar si una nueva transacción es válida. Después de cierto número de submuestreos aleatorios repetidos, la estadística demuestra que es casi imposible que una transacción resulte ser falsa.

La finalización de todas las transacciones es inmediata, sin necesidad de otras confirmaciones. La ejecución de un nodo validador y la validación de transacciones presentan requisitos de hardware mínimos y accesibles, lo que ayuda al rendimiento y la descentralización, resultando incluso ecológico.

En tanto, el protocolo de consenso Snowman, que se se basa sobre el protocolo de consenso de Avalanche, ordena las transacciones de forma lineal. Esta propiedad es beneficiosa cuando se interactúa con contratos inteligentes. A diferencia del protocolo de consenso de Avalanche, Snowman crea bloques.

Avalanche se desarrolló para abordar algunos de los problemas que enfrentan la mayoría de las redes blockchain. Al ser una alternativa a redes como Ethereum, la red Avalanche trabaja para combatir la centralización, en el ambiente de las criptomonedas, operando para combatir la congestión y mantener comisiones bajas.

Congestión: Avalanche se diseñó deliberadamente teniendo en cuenta la escalabilidad. Avalanche está a la altura de procesadores de pago de primer nivel como PayPal y VISA, y tiene tiempos de transacción inferiores a un segundo. Además, Avalanche es tremendamente potente y eficiente, ya que tiene la capacidad de procesar hasta 6,500 transacciones por segundo con una finalización inferior al segundo. Esto supone una gran mejora respecto a las limitaciones de Ethereum en cuanto al número de transacciones que se pueden procesar por segundo.

Comisiones bajas: Considerada por muchos como un competidor de Ethereum, Avalanche también supera a Ethereum en términos de tasas de gas. Las tarifas de Avalanche son más asequibles que las de Ethereum por un amplio margen. Las tasas en la red se utilizan para varios propósitos como para la creación y acuñación de activos, staking, tasas de transacción y creación de blockchains, después de lo cual estas tasas se queman, reduciendo permanentemente el número de AVAX dentro de la plataforma.

Las cuotas usadas se queman porque “$AVAX es un activo escaso y con un tope rígido que se utiliza para pagar las cuotas y asegurar la red”. 

Interoperabilidad: Cada proyecto tiene sus propias necesidades cuando se necesita una blockchain. En el pasado, los proyectos tenían que trabajar con Ethereum, con otra blockchain individual no adaptada a sus necesidades, o bien con una blockchain privada. Por eso, alcanzar un equilibrio entre personalización y cooperación entre múltiples blockchains ha sido un gran desafío. Avalanche ofrece soluciones mediante Subnets: blockchains personalizables específicas de aplicación que comparten la seguridad, velocidad y compatibilidad de la red principal.

Como vimos, la plataforma Avalanche utiliza el método de prueba de participación (PoS) para verificar las transacciones, conocido como Staking, un mecanismo natural para la participación en una red abierta y ofrece un argumento económico directo: la probabilidad de éxito de un ataque es directamente proporcional a una función de costo monetario bien definida. Los nodos realizando staking son económicamente motivados a actuar de forma virtuosa y evitar comportamiento que pudiera dañar el valor de su stake (participación).

Con la ayuda del Consenso de Avalanche, que es un protocolo probabilístico, funciona convirtiendo efectivamente a cada nodo en una estación de votación independiente que decide si se aceptará o rechazará una nueva transacción, de acuerdo con los estándares de validación de la cadena de bloques.

El consenso de Avalanche utiliza un submuestreo aleatorio repetido (un nodo validador selecciona arbitrariamente un pequeño grupo de otros validadores para tomar una decisión de aceptación o rechazo) hasta que se alcanza un umbral de confianza suficiente. Este proceso está diseñado para garantizar un margen de error extraordinariamente pequeño al tiempo que promueve la escalabilidad y el alto rendimiento.

Otra característica atractiva del consenso de Avalanche es su consumo de energía relativamente bajo. El consenso está diseñado para obligar a la actividad del nodo solo cuando hay una transacción por votar. De lo contrario, los nodos permanecen en silencio.

La cadena de bloques Avalanche ha ido expandiendo su gama de funcionalidades que enriquece a su ambiente y crea interesantes atracciones para usuarios, desarrolladores e inversionistas. El ecosistema Avalanche también incluye la máquina virtual Avalanche (AVM), que funciona como capa de aplicación y proporciona a los desarrolladores herramientas de programación y funcionalidades para crear aplicaciones descentralizadas en la red Avalanche. La AVM es fundamental para crear y comercializar activos inteligentes dentro del ecosistema. Demos un vistazo a las oportunidades que Avalanche ofrece a la comunidad de Web3[7].

Avalanche es una blockchain llena de sorpresas y con un futuro insospechado. Su versatilidad, contundencia, fortaleza, eficiencia y efectividad, la ponen a la vanguardia de las cadenas de bloques más prometedoras, gracias al abaníco de proyectos de web3 que se han ido consolidando en su plataforma.

Incluso, no se vale tanto por el valor relativo de su token, AVAX, porque son tantas las proyecciones positivas, que no podemos considerar que se trata de un token especulativo. En esta ocasión, tenemos un activo digital de valor. Luego, los expertos en blockchain e inversionistas son lógicamente optimistas, tanto sobre el token AVAX como sobre la red Avalanche, como una cadena de bloques de capa 1 de alto valor.

La red Avalanche se está volviendo popular, merced a su rendimiento y potencial de escalabilidad; su innovador mecanismo de consenso y su sólida seguridad; también, por su flexibilidad y personalización para los desarrolladores que crean DApp´s.

La velocidad de la cadena de bloques de Avalanche es más rápida que la de Ethereum, por ejemplo, manteniendo tarifas de transacción más bajas. Aunque Ethereum tiene mayor descentralización y sostiene una ventaja importante en el mercado.

El ambiente de uso de la red Avalanche recién está en expansión y ya está ofreciendo interesantes propuestas en DeFi; Gaming; NFT´s y con la propia AVAX, qu verá el reflejo de los desarrollos y la masificación que tanto necesita la web3.

Al igual que muchos de los proyectos blockchain en desarrollo, Avalanche tiene mucho que entregar a los usuarios. Es cosa de tiempo, perseverancia y mucha paciencia, para que finalmente sea reconocida como una blockchain líder de mercado y que los usuarios e inversionistas se atrevan a confiar en el crecimiento sostenido de las “sorpresas digitales” que aún debe proporcionar al mundo digital.